Las pastillas de freno de los carros están en constante desgaste por uso, si no se lleva una revisión constante de estas es posible que afecten la potencia del frenado del vehículo.
Las pastillas de freno son de los componentes de seguridad más importante del carro. Están encargadas de disminuir la velocidad o detener el movimiento del vehículo, funcionan al presionar los pedales. Están formadas por un material que, al calentarse, aumenta la fricción con las ruedas.
Como ya se mencionó, el no cambiar las pastillas de freno cuando se desgastan puede provocar accidentes. Los indicadores del desgaste de las pastillas pueden ser: más holgura en el pedal, si hay chirridos durante el uso del freno o si la eficacia del frenado es menor. Un indicador más es si la luz del sistema de frenos se enciende en el tablero.
Para poder hacer el cambio de las pastillas de freno se debe primero levantar el vehículo, además de quitarle las ruedas. Seguido deberá localizarse los pistones dentro del tambor donde están los discos de freno y se procederá a sacarlos con un destornillador plano.
Retire los tornillos que sujetan las pinza y extraiga esta junto a la placa base. Ahora podrá ver las pastillas desgastadas, las cuales procederá a retirar para instalar las nuevas utilizando un taladro manual o un destornillador inalámbrico a baja revolución; teniendo cuidado extra de no dañar los pernos roscados.
Una vez listos estos pasos, se recoloca todo en el orden contrario al desmontaje. Es decir, devuelve la placa base junto a la pinza a su lugar, reinserta los pistones, coloca las ruedas y bajar el automóvil. Asegúrese de que todos los pernos y tornillos estén bien apretados.
Las pastillas de frenos se fabrican normalmente en tres familias:
Suelen ser muy recomendadas ya que sus compuestos de fabricación las hacen más blandas, los que les permite tener una mejor mordida o adaptación al diseño del disco. Aunque no es recomendada para una conducción extrema, su uso es mejor para recorridos suaves. Tienden a desgastarse más rápido.
Entonces, estas deberán elegirse según el tipo de uso que se les dará, ya que cada compuesto está diseñado para proporcionar lo mejor de sí, no solo en rendimiento sino, también, en desgaste.
Algunas recomendaciones para cuidar del motor y de las pastillas de frenos son: